No faltan referencias clásicas y coleccionables A lo largo de los más de 60 años de historia del TAG Heuer Carrera son numerosas las referencias clásicas que despiertan el interés de los coleccionistas, y algunos de los más buscados son los Carrera Dato. Con su inusual diseño asimétrico con una única subesfera a las 3 en punto y la ventana de fecha a las 9, el Carrera Dato 45 ref. 3147 de 1968 es motivo de inspiración para una de las novedades presentadas en la LVMH Watch Week 2024, el TAG Heuer Carrera Chronograph Glassbox Green.
El TAG Heuer Carrera Chronograph “Dato” recurre a la contemporánea caja Carrera “Glassbox” de 39 mm de ancho en acero. Desde su introducción en 2023, la caja Glassbox se ha convertido rápidamente en el diseño de caja estándar para los modernos Carrera. Las nítidas asas angulares biseladas hacia dentro son puramente clásicas de Carrera, pero los robustos pulsadores de tipo pistón y sobretodo el espectacular cristal de zafiro abovedado sin bisel hacen del Carrera Glassbox una fascinante combinación retrofuturista. Su contenido diámetro hace que encaje en una amplia variedad de tamaños de muñeca. Con un fondo de caja rematado por un cristal de zafiro, su hermeticidad es de 100 metros.
Por supuesto, el punto focal del TAG Heuer Carrera Chronograph Dato recae en su esfera. Sobre un fondo verde azulado, la mayor parte de los elementos presentes nos son familiares: esfera cepillada radialmente, escala de segundos/minutos en el realce perimetral elevado, manecillas pulidas facetadas de tipo espada con segmento en Super-LumiNova e índices rectangulares pulidos aplicados. Aunque éstos últimos no disponen de aplicación de Super-LumiNova, los pequeños puntos que los acompañan sí son luminiscentes.
Pero son la ventana de fecha dispuesta a las 9 horas y el totalizador de 30 minutos ubicado a las 3 horas los que le confieren su carácter distintivo, un diseño que rompe la habitual simetría de los cronógrafos Carrera y que puede parecer desequilibrado. Personalmente es una configuración que me gusta precisamente por sumarle un desenfadado y atractivo dinamismo visual que rompe los más estáticos esquemas tradicionales.
En la práctica, contar con una lectura cronográfica limitada a un solo totalizador de 30 minutos y a la trotadora central apenas afecta a la funcionalidad de esta complicación, ya que pocas veces medimos tiempos superiores a esa media hora que permite el TAG Heuer Carrera Chronograph “Dato”. Pero además de la particular arquitectura de la esfera, un punto que seguro que generará controversia es el disco de fecha: en color blanco, no coincide con el de la esfera. En mi opinión no creo que sea una mala decisión, ya que la mayor presencia del blanco ayuda a llenar el vacío visual del inexistente índice horario a las 9 horas. Además, esta configuración cromática en contraste emula la del Carrera Dato vintage en que se inspira. Esto nos lleva al color de la esfera. Cuando se combina con el cepillado radial, se obtiene un azul verdoso intenso y profundo, que en muñeca tiende más a verdoso que a azulado.
TAG Heuer impulsa el Carrera Chronograph Dato con calibre cronógrafo automático TH20-07. Al igual que el resto de la familia de movimientos TH20, el TH20-07 es una evolución de la plataforma Heuer 02. En términos de prestaciones es más o menos igual que el resto de sus compañeros de colección, con una considerable reserva de marcha de 80 horas y una frecuencia de vibración de 28.800 alternancias por hora. Dispone de una rueda de pilares y un sistema de accionamiento del cronógrafo con embrague vertical. En cuanto a los acabados, el TH20-07 presenta Côtes de Genève en los puentes esqueletados y un rotor calado con la forma de escudo TAG Heuer.
El TAG Heuer Carrera Glassbox Chronograph se entrega con una correa de piel de aligátor negra equipada con un cierre desplegable y pulsadores dobles de seguridad. El reloj se suma a la colección permanente. El precio es de 6.450 €.
