Las novedades que La Chronométrie Ferdinand Berthoud ha presentado en el recientemente finiquitado SIHH2019 se han centrado en dos versiones de su primer reloj lanzado en 2015, el Chronomètre FB 1, el ganador de la Aiguille d’Or del GPHG 2016 cuyo análisis en profundidad podéis leer en éste artículo. ¿Y cuáles son las características que diferencian los FB 1 Oeuvre d’Or de los modelos ya existentes en oro rosa y oro gris?. Sencillamente, la decoración de las esferas y los semi-puentes de su espectacular calibre FB-T.FC.
Además de estos nuevos acabados, la versión de oro gris es también la primera creación engastada de la Chronométrie Ferdinand Berthoud. Cada una de estas dos nuevas versiones se ha fabricado en una exclusiva edición limitada de cinco ejemplares y ambas se han inspirado en una pieza concebida por Ferdinand Berthoud, el reloj de bolsillo astronómico N° 3, ensamblado y ajustado en 1806 en Paris por su alumno Jean-Martin y que actualmente se encuentra en la colección del L.U.CEUM en Fleurier.
Las característica técnicas son exactamente idénticas que en las primeras versiones de oro gris con asas de titanio (FB 1.1) y oro rosa con asas de cerámica negra (FB 1.2): caja octogonal de 44 mm y 13 mm de grosor, que alberga el calibreFB-T.FC con una inédita construcción de tipo huso-cadena suspendida de fuerza constante. Con una peculiar arquitectura con seis pilares periféricos que unen las dos pletinas, está equipado con un tourbillon de 60 segundos y un dispositivo de reserva de marcha mediante un cono móvil.
En ambos modelos, sus esferas de oro amarillo (FB 1.1-2) u oro rosa (FB 1.2-1) han sido patinadas a mano mediante una técnica de grabado que exige una gran destreza manual. Al principio el oro se granea delicadamente con ayuda de un punzón para, posteriormente, ser trabajada con la ayuda de una herramienta denominada «graneador». El resultado es que la luz se refleja con una infinitud de matices tornasolados, que nos recuerdan la pátina natural de la esfera del reloj de bolsillo astronómico N°3 que ha inspirado al Chronomètre FB 1.
Cada una de las cinco esferas de esta serie limitada se graba a mano y se colorea para perfeccionar la legibilidad del conjunto.
Al igual que las creaciones originales de Ferdinand Berthoud, están decoradas con unos grabados hechos a mano que conforman su identidad: «Ferdinand Berthoud – Chronomètre – Val-de-Travers – Suisse», seguido del número individual de edición limitada, «N° X/5».
Tal como hemos avanzado, los tres semi-puentes de su calibre también reciben una decoración inédita en los FB 1: el grabado con motivo «pirámide», conseguido mediante el trabajo artesanal con el punzón a mano alzada con una precisión y una regularidad impecables. Este grabado ya presente en Ferdinand Berthoud en sus Régulateurs FB 1R se inspira en la base de un péndulo de Ferdinand Berthoud que se conserva en el L.U.CEUM que Chopard posee en Fleurier.
Además, también incluye unos cartuchos de oro que llevan las menciones «Ferdinand Berthoud, Chronomètre Suisse 45 rubis», situados a ambos lados del tourbillon.
Con la versión en oro gris FB 1.1-2 es la primera vez que algunas de las superficies del reloj incorporan unos diamantes talla baguette. Esas cuatro superficies se ubican a ambos lados de la corona y a los lados del grabado del número de edición limitada situado enfrente, a las 9 horas. Es decir, ocupan el lugar de los característicos ojos de buey que en el resto de referencias permitían visualizar los órganos clave del movimiento. Junto a ellos, la corona también está engastada con diamantes.
Aunque cabe reconocer el valor de estas decoraciones, acabados y engastes, me sigo quedando con la imagen más atemporal de las primeras referencias, aunque el personalmente, el modelo que me más me sigue fascinando es el FB 1.4 de titanio y sus puentes de zafiro.